Jose.


Otra vez tú, igual que la última vez que estuviste en mi vida. Y ha habido tantas cosas que he echado de menos. Por mucho tiempo me ha faltado ese cierto cariño que tú me dabas y me hacia tan feliz. Que aunque luego me rompieras en dos y desaparecieras, una parte de mi gritaba tu nombre con desesperación. Lo digo ahora y no cambiaré de parecer por muchas cosas que sucedan. Pero volviste, estas aquí de nuevo. Te extrañé mucho, y lo sabes, tú sientes igual. Otra vez, me estas demostrando ese cariño de hace tiempo, que aunque no sea como queremos se me es igual, será como tenga que ser, se hará como se tenga que hacer y haremos lo posible. Siempre fui y seré tu droga, y no me arrepentiré de ser esa sustancia que te alegre cuando más lo necesites. Porque tú, tu querido mío me has dado fuerzas muchas veces y te lo he agradecido tanto que no sirven las palabras para demostrarte mi gratitud. Siempre Jose, siempre me tendrás en tu vida para cualquier cosa. Eres para mí un tipo de Dios y lo sabes. Mí Dios.
Solamente te voy a pedir una cosa, y es que no vuelvas a desaparecer así como la última vez. Me he acomodado a ti de nuevo, y si marchas me perderé.
Una Blandi Blú no me quitará el puesto, por mis ovarios que no lo hará. Y mucho menos una Putiade, la cual merece sufrimiento masivo.

Te quiero loco. Que siempre lo has estado y me apuesto lo que quieras a que seguirás estándolo.

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